La
estimulación temprana se basa en conocer como se forma la estructura del
cerebro, para estimular y fortalecer cada una de sus etapas, crear una
estructura cerebral, sana y fuerte, tanto física como intelectualmente. Y se
habla de “temprana” porque ser realiza en los primeros 5 años de vida de los
niños, que es el período donde el cerebro crece hasta su tamaño estándar.
EDAD DE 0 A 6 MESES
Estos juegos ayudan a
que el bebé sea consciente de las diferentes partes de su cuerpo, la
interacción social del los padres con el niño desarrolla la seguridad que
necesita para crecer.
Pon a tu bebé en
tu regazo, realiza movimientos de las partes de su cuerpo, moviéndolos hacia
arriba, hacia abajo, a los lados etc.
Sopla suavemente
sobre las palmas de sus manos, sopla en diferentes partes de su cuerpo
mencionando el nombre de cada parte.
Sujete un pañuelo
o bufanda de colores vivos delante de tu bebé, muévelo lentamente mientras le
hablas, o le cantas, sigue moviéndolo de un lado a otro pausadamente para
alentarlo a seguirlo con los ojos.
A los dos meses a los
bebés les encanta mirar las caras, especialmente de caras de personas queridas,
intenta hacer diferentes tipos de caras y sonidos para desarrollar la vista y
el oído de tu bebé.
Cántale una
canción mientras mueves la boca exageradamente, parpadea, sácale la lengua, haz
muecas, tose, bosteza etc.
El cerebro de los
bebés prospera y crece gracias a la información trasmitida por su entorno.
Sujeta un sonajero
delante de tu bebé y agítalo suavemente, mientras cantas una canción.
Sigue el
movimiento del sonajero por diferentes partes de la habitación y mira como tu
bebé mueve la cabeza hacia el sitio donde proviene el sonido.
Si colocas un
móvil de tal manera que su sombra se refleje en la pared, harás que se
desarrolle la vista del bebé.
Las pelotas
grandes son muy útiles para muchos juegos con los niños pequeños, colócalo con
la barriguita contra la pelota mientras lo sostienes por los lados con ambas
manos y haz que ruede la pelota lentamente hacia delante y hacia atrás.
EDAD DE 6 MESES A 1
AÑO
Siéntate delante
de un espejo con tu hijo en tus piernas, di ¿quién es ese bebé?, saluda con la
mano del niño y di “hola bebé”, pregunta ¿dónde está el pie del bebé? Sigue
haciendo preguntas y moviendo las partes de su cuerpo.
Sujétalo firmemente
por debajo de los brazos y muévelo con suavidad sobre una superficie blanda
como si bailara, pon música o canta una canción.
Tan pronto tu bebé
pueda sentarse sin problemas, prueba a rodar una pelota hacia él, ruédala con
suavidad y enséñale como agarrara.
Siéntate en una silla
con la espalda recta. Cruza las piernas y sienta al bebé sobre tus tobillos,
sujétale las manos y mueve tus piernas para arriba y para abajo.
Con esta actividad
le ayudarás a desarrollar sus músculos de motricidad gruesa, con almohadas y
cojines haz una pila con ellos en el suelo, ponlo delante de ellos para que
intente trepar, pon un juguete favorito en el cojín más alto para que lo
alcance.
EDAD DE 1 A 2 AÑOS
Para que el cerebro
de un bebé se desarrolle, es necesario que al pequeño se le proporcionen
ambientes que lo estimulen tanto a nivel emocional como intelectual. Dependiendo
de las necesidades de desarrollo del niño y las aptitudes puedes animarlo a que
realice estas actividades:
Apilar aros
pequeños de mayor a menor, o a la inversa o simplemente apilarlas.
Lanzar los aros a
cierta distancia.
Hacer que den
vueltas.
Jugar con tu bebé
sobre tus hombros, sujetándolo firmemente, mientras lo vas moviendo, cántale
una canción.
Este juego
desarrolla la fuerza de la parte superior del brazo, y además al bebé le
encantará, siéntate mirando a tu bebé, con una bufanda, agarra de un extremo y
da al niño el otro extremo, jala con suavidad, enseña a tu hijo que el también
lo haga.
Jugar al aire
libre cuando hace un día maravilloso es una manera estupenda de experimentar
con todos los sentidos.
Deja que el bebé
gatee por el pasto mientras gateas a su lado.
Nombra cada cosa
que le parezca interesante.
Huele las flores,
hazle cosquillas con una brizna de hierba, busca insectos, etc.
Dar vueltas sobre
el pasto también es divertido, hazlo con él.
Levanta los brazos
en el aire y después dóblate hasta tocarte los pies, anima al niño a que haga
lo mismo. Repítelo varias veces y después nombra cada parte de tu cuerpo.
ACTIVIDADES PARA LA
REALIZACIÓN DE LA MATROGIMNASIA
Matrogimnasia es el ejercicio físico que es llevado cabo por
el hijo y la madre con la finalidad de fortalecer los lazos de unión y de
actitud cooperadora así como de las diversas forma de relación madre-hijo, al
finalizar la matrogimnasia es demostrada por medio de una rutina con música.
Recomendaciones
Es importante que
para llevar a cabo las actividades se dedique un tiempo entre 20 a 30 minutos, que
se realice en un área al aire libre, en
un lugar donde haya pasto y sea amplio. Se debe hacer una planeación donde se
especifique lo que se va obtener y lo que van a realizar los padres con los
niños por estrato de edad. Si es posible, implementar un día al mes, para
realizar la matrogimnasia, junto con madres y padres de familia.
Actividad 1
Materiales:
Una pelota.
1.
Se sienta uno frente al otro y con las piernas extendidas a los lados con una
distancia corta se pasan la bola uno al otro.
2.
Luego se intenta pasar la pelota por el aire (niños de más edad).
3.
De pie, pases pateando la pelota.
4.
Pasarse la bola con las manos.
5.
Pasar la pelota rebotando.
Actividad 2
No se necesitan materiales. Estos ejercicios se pueden realizar
con bebés de 4 meses en adelante.
1.
Trotar con nuestro hijo o hija en brazos.
2.
Caminar muy despacio con el bebé en brazos.
3.
Sentadillas con nuestro bebé, sostenido con nuestros brazos estirados al frente
de nosotras.
Actividad 3
Material: coche de bebé.
1.
Con el bebé en el coche, se coloca una pierna delante y otra atrás, se va a
llevar el coche hacia delante y hacia atrás. Cambiar la pierna. Luego se puede
caminar un poco para relajar las piernas, empujando el coche.
2.
Con el bebé en brazos elevarlo sobre su cabeza y bajarlo.
3.
Trabajo de brazos y tronco. Tomar a su bebé con los brazos estirados y rotar el
tronco hacia un lado y hacia el otro.
4.
Abdominales. Acostada boca arriba flexionar sus piernas y colocar al bebé sobre
éstas. Subir y bajar las piernas.
5.
Abdominales. Colocarlo entre sus piernas flexionadas y el abdomen, los brazos a
los lados y realizar un movimiento de arriba abajo con los mismos.
Todos
los ejercicios mencionados deben de realizarse con moderación ya que tú cuerpo
no debe de fatigarse y necesita también energía para poder pasar el resto del
día y noche.
Recuerda
tomar mucho líquido, alimentarte bien y descansar cuando puedes.
Actividad 4
Estiramientos y relajación
1.
Acostada boca arriba, con tú bebé sobre su pecho realizar inhalaciones y
exhalaciones pausadas.
2.
Colocar a su bebé sobre el suelo (se puede usar un yoga mat), en medio de sus
piernas estiradas y abiertas. Intentar tomarte los dedos de los pies, pasar al
centro donde está su bebé y luego a la otra pierna y se repite.
3.
Sentada como mariposa, sentar a su bebé en el centro y respirar profundo. Luego
acostar a su bebé utilizando pies como almohada para él e intentar estirar su
tronco hacia al frente donde está el niño.
Conforme
se realice la rutina usted y su bebé se sentirán a gusto con el ejercicio
experimentando un sentimiento de felicidad cada día.
Siempre
que se realicen estos ejercicios es compartiéndolo con su hijo o hija, así que
es necesario conversar con ellos y disfrutarlo.
Recuerde
que antes de realizar una de estas rutinas debe de conversarlo con su doctor
para un visto bueno y si tiene mucho tiempo de no hacer ejercicio o si nunca lo
ha hecho lo mejor es empezar con rutinas que no impliquen mucho esfuerzo hasta
las rutinas más fuertes.